Materiales tales como pañolenci, fieltro, lanas, mostacillas, telas y puntillas sirvieron para crear estos prendedores-muñecas llamadas jopitos porque todas ellas, aún distintas, se caracterizan por un flequillo largo al costado que cubre uno de sus ojitos.
Las hay rubias, morenas, pellirrojas, castañas, románticas, atrevidas, enamoradizas...
Son ideales para que luzcan las niñas en sus remeras o bien las jovenes para prender un saquito.
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